Es un seguro pensado para proteger el patrimonio de comunidades de vecinos y propietarios de edificios contra los riesgos que puedan poner en peligro los elementos comunitarios.
A excepción de las Comunidades Autónomas de Valencia y Madrid que establecen la obligación de contratar este seguro, no es una póliza obligatoria. La Ley de Propiedad Horizontal no contempla esta opción, aunque es altamente recomendable para evitar que los vecinos hagan frente a cuantías elevadas.
Residir en una comunidad supone compromiso y respeto por las normas de convivencia básicas. Cabe resaltar que cada comunidad establece sus propias normas desde que la mayoría implicada este a favor de ellas.
Esta póliza incluye de manera indispensable las coberturas de incendios y la de riesgo a terceros. Otros riesgos a los que se está expuesto son:
- Robos
- Daños eléctricos
- Desperfectos por fenómenos atmosféricos
- Plagas
- Daños por agua procedentes de edificios contiguos
- Rotura de maquinaria
- Grafitis